jueves, 7 de enero de 2016

"Juventud y Militancia"


   Buenas tardes compañeros y compañeras.  Ésta tarde helada de invierno se transforma en  cálida gracias al calor humano , el entusiasmo y el fervor en este acto dirigido principalmente a ustedes, a la juventud que hace honor con su presencia y a nuestros nuevos dirigentes que tomaran la conducción de la provincia de Misiones y de la república Argentina en estas próximas elecciones.


Antes de comenzar con mi pequeña exposición permítanme hacer una apreciación: ¡Qué hermosa que es la palabra compañero/a! Remontándonos a los orígenes etimológicos de su significado, ella proviene del vocablo italiano compagni  y quiere decir: “compartir el pan con el prójimo”.


 En nuestra doctrina justicialista y en los diferentes gobiernos de carácter y conducción peronista el alimento fundamental para compartir con el pueblo es la justicia social y para el militante la lucha permanente y la organización de la comunidad.


Organizarse, para la doctrina justicialista, es una convocatoria a la acción para que la nueva juventud militante asuma responsabilidades que tengan como prioridad fundamental a la comunidad. Esto se traduce en participar y actuar solidariamente en su barrio, en su escuela, en la universidad, a trabajar en diferentes cooperativas, etc pequeñas pero grandes realizaciones que aportan un granito de arena primero en sus respectivos municipios y provincias para abarcar, luego, toda la Nación.


La militancia tiene que ser una unión de voluntades, esfuerzos y responsabilidades compartidas en la que el Estado, siempre con gobiernos populares al frente, sea el garante de brindar los diferentes medios de acción y la comunidad, al frente de militantes honrados que se dirijan al corazón del pueblo para permitir el mejor aprovechamiento de los recursos brindados por la Nación.


En una palabra, la  nueva militancia joven y naciente invita a la comunidad a organizarse. Para resumir, la esencia de la doctrina justicialista del general Juan Domingo Perón, está contenida en esta pregunta en la que ustedes compañeros/as al finalizar este acto tienen la tarea  y la obligación de responder (eso si quieren ser militantes peronistas con todas las letras) ¿De qué somos capaces los jóvenes cuando nos reunimos, nos organizamos, pensamos  y decidimos?.


 Sin duda, los hombres, así como también,  cometen las injusticias más nefastas, las guerras más sangrientas, las corrupciones más violentas son capaces de crear las obras más grandes y bellas,  promover la paz como lo hace nuestro representante del cielo en la tierra, el Papa Francisco y los dirigentes populares latinoamericanos que velan por el bien común de nuestros pueblos hermanos.


El tiempo histórico del nuevo militante no es el futuro, sino el presente, la puerta está abierta y de par en par para que ustedes, juventud, antes llamada divino tesoro, hoy llamada divina militancia, participen se comprometan y luchen combativamente en los ámbitos y sectores en los que ustedes están formados ya sea como trabajadores universitarios o profesionales.


Nuestra doctrina está guiada por la fe y se obtiene acariciando los afectos del pueblo y de la patria que se ganan con la eficaz conducción , gestión y ejecución. Todos los jóvenes seremos héroes militantes si tomamos la decisión de seguir cambiando la realidad de los ciudadanos a través de una educación centrada en valores éticos y morales.


Compañeros y compañeras les advierto que la única traición es abandonar las banderas de la militancia. Traicionar al enemigo es la pasividad actuando  como espectadores mudos del régimen que los monopolios, un sector  de la sociedad y la opinión pública nos quieren imponer consciente e inconscientemente, como decía el general en su libro base “La comunidad organizada”(1949) necesitamos una comunidad donde el individuo tenga realmente algo que ofrecer al bien general, algo que integrar y no sólo su presencia muda y temerosa. 


Por eso juventud misionera las tres palabras que deben tener en cuenta ahora y siempre por las décadas que vendrán son las siguientes: Fe, en ustedes mismos en su capacidad incuestionable como militantes , convicción en el modelo y el proyecto de país y en sus dirigentes que continuarán con las bases peronistas, y acción permanente que sin decir más ni agregar menos es la militancia.







" 70´ Aniversario del 17 de octubre de 1945. Homenaje a mujeres luchadoras de la provincia de Misiones."



   ¡Buenas tardes compañeros y hermanos peronistas! Nuevamente es un honor representar, con este homenaje, a las nueva dirigencia juvenil del Partido Justicialista.

Eva Duarte fue la primera mujer,casualmente en las escrituras bíblicas y en la Patria Argentina, ella fue la elegida para brindar su inmenso corazón a la más valiosa y relegada, hasta su llegada, clase social: la de sus queridos descamisados, los humildes, los bellos de corazón, los trabajadores, los niños, los ancianos y el género femenino.

Eva,la primera, fue la encargada de gestionar y administrar el ministerio de amor al servicio de los inhóspitos territorios de la nación trabajando incansablemente. Literalmente puso el cuerpo en su quehacer profundamente cristiano y humano, hasta que ese organismo luminoso y hermoso por fuera y por dentro dijo “Hasta siempre”.
 
     Cualquiera puede ocupar un cargo público, por obligación, porque es designado o lo más terrible para beneficio de intereses individuales ajenos a la causa justicialista.

     En este homenaje mujeres misioneras, sigamos el ejemplo de todas las que ofrecieron su corazón y que están presentes (aplausos para ellas) y recordemos a Evita no sólo estudiando historia sino imitando su accionar siempre. Por ello que honor que ilustrar su mensaje que, aunque pasen los años, nunca pasarán de moda:


Discurso pronunciado el 4 de mayo de 1950,con motivo del almuerzo ofrecido en su honor por el Partido Peronista Femenino Distrito Capital Federal".
  

    (…)  “Les pido a todas ustedes que cuando vean en cualquier rincón del país, por más alejado que sea, a una mujer que tiene un corazón bien puesto… traten de acercarla a nuestras filas … piensen que nuestro movimiento es grande y que hay cabida para todas, para que trabajemos una para todas y todas para una… que no sea un slogan sino una realidad… La que a ustedes les parezca más insignificante es la que está más cerca de mi corazón (…) sacrifiquémonos, no pensemos en horarios ni en nada. Estamos luchando por el ser o no ser de la Patria.”
 

 (...) “Necesitamos valores femeninos jóvenes. Debemos actuar en estrecha colaboración con los hombres animadas por el mismo ideal y constituyendo dos fuerzas paralelas que se complementen. Empecemos por ser disciplinadas. Seamos unidas. La sra de Perón quieren que tengan un arma poderosa en su unidad y que sean organizadas: así, triunfaremos; si no, no. Yo quiero ser para las mujeres peronistas como madre, como la hermana que trata de comprenderlas de ayudarlas y de hacer que se entiendan y ayuden entre ustedes mismas”.