viernes, 17 de junio de 2022

“Savia Sangre (Tuguy-Yvirary) de Alejandro Rodrigues: entre la historicidad y la ficción”

“El hombre es un lobo para el hombre”

                                                                                           Tomas Hobbes


 En el presente trabajo pondremos en consideración y en diálogo la obra Savia Sangre del ex preso político y Licenciado en Letras Alejandro Rodrigues. Perfilaremos el recorrido de su proyecto literario-intelectual brindado en una entrevista amena y distendida en la cual se pudo apreciar el posicionamiento ideológico y político respecto a su narrativa.

   Savia Sangre está marcada a fuego por la sangre como metáfora de la violencia ejercida por el hombre en su faceta más cruel, pero sobretodo en el auge de las luchas revolucionarias en pos de la liberación de la Patria en contra de un Estado represor, dictatorial y dominante.

En el desarrollo del texto brindaremos un recorrido teórico para explicar los conceptos que nos servirán de análisis en vistas de enmarcar al autor dentro de la denominada literatura territorial, motivo, por el cual, su obra podría ser leída como el bosquejo literario de un claro proyecto político e ideológico a través de algunos pasajes de Savia Sangre.

Walter Benjamin en su ensayo “El narrador” (1991)  nos acerca una postura particular del sujeto que cuenta una historia: (…) “El narrador es el hombre que permite que las suaves llamas de su narración consuman por completo la mecha de su vida” (Benjamín, 1991:134).

Para Alejandro Rodrigues contar y narrar están presentes al comienzo de la vida y al final de ella manifestada visiblemente por la sangre: en el parto al nacer y al morir de manera trágica y violenta. 

En cambio la savia es un elemento que otorga vida a objetos materiales e inmateriales. Esta fusión narrativa constituiría una experiencia vital que mantiene sus fuerzas y  resiste hasta el ocaso de sus días:



 (…) “Tanto la sangre como la savia son líquidos elementales para la vida en el mundo tanto vegetal como animal ese es el concepto englobante del título de la obra... La vitalidad se asocia a la necesidad y a la vitalidad de la narración para que la literatura persista en esa savia sangre en la narración” (Entrevista a Alejandro Rodrigues,2018)


La narración y su manifestación literaria en Savia Sangre tocan una fibra íntima, peculiar y natural del ser humano, de esta manera el verbo contar y su carga performativa conformarían el acto más moral, auténtico y más cercano a la verdadera naturaleza humana; y en este devenir la narración se aproxima nuevamente a lo que hay de esencial en el hombre (Cfr. Parret, 1994:36).

En la entrevista Rodrigues expresaba el leimotiv que lo incitaba a escribir: un acto inconsciente, esencial y primigenio:(…) “Lo que escribo tiene que ver con los impulsos, estado primitivo de la emoción y los sentimientos entendido como eso que gobierna el impulso humano. Según los románticos es el sentimiento” (Rodrigues, 2018)

Además en la entrevista Rodrigues permite delinear la configuración de la propia cosmovisión de sus relatos:

 (…) “Catorce cuentos constituyen Savia Sangre de los cuales trece tienen que ver con la violencia del Estado, del capitalismo, con la violencia del Terrorismo de Estado, la violencia familiar y personal. El eje conductor de las narraciones tienen que ver con la violencia” (Ídem: 2018)



En términos semióticos el mundo del relato de Savia Sangre implicaría una singular actividad narrativa en relación, a los tópicos arriba mencionados, que mostrarían las acciones humanas y  la posición histórica eterna del hombre  tanto en la naturaleza dominante como en la cultura (Cfr.Parret, 1994:57)


Savia Sangre (Tuguy-Yvirary): Paisajes Ficcionales.


la relación entre realidad y ficción está presentes en la problemática de la literatura en general. La obra de no estaría sustraída a sus rasgos biográficos. Su militancia en el Frente Justicialista de Liberación Nacional (FREJULI) a principios de la década del setenta, su consecutiva detención el 20 de octubre de 1976 y el recorrido en distintos campos de concentración del país entre los que podemos citar: La Jefatura de Policía, La Unidad Penal de Candelaria, La Plata y Coronda, Resistencia resuenan en la temática de la mayoría de sus cuentos.
Desde un enfoque socio semiótico analizaremos y pondremos en foco la disyuntiva entre historicidad y ficción en Savia Sangre ampliaremos el panorama con posturas teóricas de diferentes críticos y entablaremos conversaciones con el posicionamiento personal en torno a la obra brindada en la entrevista.
No podemos negar la intrínseca relación entre vida, realidad y ficción .Las fronteras son difusas y permeables. Lo que habría que descifrar conceptualmente no sería la verdad de lo ocurrido, sino el vaivén de la vivencia, lo dejado en la sombra, que historia (cuál de ellas) cuenta alguien de sí mismo o de  un otro yo (Cfr. Arfuch, 2002:60).

Una de las preguntas de la entrevista brindada por Rodrigues versó acerca de los cronotopos que desplegaba en su narrativa: (…) “Los tópicos que se relatan es la realidad histórica .Narro acontecimientos históricos y dentro de ellos marco límites de espacios y lugares concretos” más adelante reflexiona: 


(…) “Los cuentos tienen que ver con cuestiones más particulares como la cárcel de Candelaria como “En el lobo ya no está”, la vivencia, las emociones, las sensaciones,las esperanzas que como jóvenes experimentábamos en la cárcel de Candelaria donde fuimos terriblemente torturados por el guardia “El Lobo” que era el oficial a cargo de la tortura ahora está condenado a veintitrés años de cárcel” (Rodrigues,2018)


La historicidad tal como la define Paul Ricoeur (1983) es entendida como:


 “La inserción del existente presente en un transcurso de la historia. La elaboración conjunta y recíproca de la historia de tradiciones de un sentido de la existencia presente a partir del cual un individuo retoma su historia” (Ricoeur, 1983:117)



En palabras de Rodrigues el torturador del cuento “El lobo ya no está” en el presente “real” ya fue condenado. En la narración el autor/ escritor retoma retazos de la historia reciente de la Argentina y su participación en la misma más específicamente el período que corresponde a la última dictadura cívico militar (1976-1983) que por su accionar más sangriento, miles de militantes afines a ciertas tendencias del peronismo proscripto sufrieron encarcelamientos, torturas, vejámenes, exilios y tuvo como consecuencia la desaparición de treinta mil personas.

El punto clave de la historicidad sería la dimensión constitutiva de la subjetividad que en el acto de narrar  instalaríanactos realizados, percepciones y pensamientos (Ídem, 1983). Rodrigues fue solo un agente portavoz de las “sensaciones, miedos y esperanzas que como jóvenes experimentábamos”. 

El acto fue poner el cuerpo para la tortura, la percepción: el temor infundido por el aparato terrorista del Estado y los pensamientos  esperanzadores  a pesar de haber permanecido en un ambiente hostil y cruel.

Podríamos inferir que la realidad plasmada en la narrativa de Savia Sangre, según la propia mirada de Rodrigues, estaría localizada en un espacio biográfico que, con su valor memorial, trae la rememoración de un pasado con su carga simbólica y a menudo traumática para la experiencia individual y/o colectiva (Cfr.Arfuch, 2002:67)

Visualizamos que la experiencia de cárcel de Alejandro Rodrigues lo llevó a escribir un relato de la vivencia particular de un compañero  en una de las tantas cárceles en las que estuvo privado de su libertad.

 En esta dirección el espacio biográfico individual se inclinó hacia una narración colectiva donde la atmósfera siguió siendo las experiencias traumáticas de las situaciones límites padecidas en el presidio pero con una cuota de humor cómplice:


(…) “En la cárcel de Coronda no nos permitían tomar mate…el cuento “Mientras extraño tu aroma y tu sabor” hay un coqueteo con lo erótico como gancho. El tema es el sabor y el aroma del mate que estaba prohibido… Es la historia de un compañero que era un hombre grande que participó en la guerra del Chaco, estuvo preso fue torturado…pero a pesar de todas esas torturas, golpes y vejámenes hay una sola de la que no sobrevivirá... Expresaba: “He sobrevivido agónicamente pero me parece que a esto no voy a poder sobrevivir que no me dejes tomar mate” (Rodrigues, 2018)



El matiz biográfico en la narrativa de Alejandro Rodrigues estaría conectado con su formación e instrucción como cuadro militar con el objetivo de liberar al Paraguay del yugo stronista (Cfr. Rodrigues, 2016:16).

En uno de sus cuentos llamado “Del otro lado del umbral” se menciona la participación del narrador en el Movimiento Revolucionario 14 de Mayo por la liberación del Paraguay (Ídem: 31). Este movimiento revolucionario unió las fuerzas conjuntas de jóvenes militantes e idealistas para derrocar el régimen dictatorial del General Alfredo Stroessner en el país fronterizo.

La participación de Rodrigues en el movimiento revolucionario descripto se vio reflejado en varios de sus cuentos como en “AhaJeyta” (Voy a volver): (…) “Era uno de los escasos sobrevivientes de aquella aventura en plena selva del Alto Paraná… para derrocar a aquél general dictador de apellido germánico” (2016:35) 

Al igual que en el cuento “Mientras extraño tu sabor y tu aroma”: (…) “  Fui joven soldado en la contienda del Chaco paraguayo y miembro de las columnas del Movimiento 14 de Mayo que intentó derrocar a la dictadura del General Stroessner en 1960” (2016:47)

A pesar del acento biográfico en su narrativa pudimos advertir la resonancia del espacio biográfico en estos pasajes pero, en cambio, estaríamos ante la presencia de un mundo exclusivamente ficcional a pesar de que aquellas fronteras, a veces, resulten ilegibles.

Cabe resaltar que aquellos contextos existen (realidad, vida y ficción) pero que una vez atravesados la umbralidad literaria no podrían convertirse en ficción o en invención de alguien que escribe (Cfr. Andruskevicz, 2012:9).

El carácter ficcional de la literatura inscribe lo real o los fragmentos de la realidad en un ir y venir de flujos socios semióticos. En aquel devenir los signos en la narrativa Savia Sangre nos “remiten a un mundo real e imaginado presente y ausente, concreto y abstracto” (Baren Van Heusden, 2013:15).

La presencia simultánea en Savia Sangre de militancia peronista de izquierda y antiesstronista de liberación en un escenario latinoamericano fija un territorio ideológico y político donde Rodrigues dialoga con los sucesos históricos del pasado reciente (inicios de los sesenta y fines de los setenta)los interroga, los vuelve presente, los trae a la memoria cultural local al organizarlos en un complejo universo de signos culturales que se transforman en un peculiar universo narrativo (Cfr. Santander,2012:7)



Paisajes  Políticos: Literatura Territorial.


En esta sección esquematizaremos bajo el prisma de recorridos categóricoslo que se conoce como un proyecto literario-intelectual de un autor/escritor territorial. 

Indicaremos en un primer momento lo que  correspondería  a la definición de literatura territorial que partiría de lugares comunes para abordarlo de una forma más compleja y minuciosa y cotejaremos las distintas fuentes documentales: la entrevista a Alejandro Rodrigues y su obra.

En vistas a una crítica general objetaremos el uso del tratamiento de la literatura regional que, en una simple lectura, englobaría el mero pintoresquismo como el paisaje, la estampa y el color local distintivos a la literatura de una localidad o provincia alejada de los centros dominantes de circulación y producción literaria y cultural como la ciudad de Buenos Aires.

En la primera concepción de literatura territorial/regional el lector no especializado podría caer en el reduccionismo teórico. Así Rodrigues enmarcaba la multicolorida geografía que particulariza a la ciudad de Posadas, Misiones escenario en el cual se desarrolla uno de sus cuentos: (…) “  En “Te quiero, Elisa” el paisaje narra una primavera en Posadas, las calles , las azaleas, los chivatos en flor lo que da identidad a esta ciudad” (Rodrigues,2018)

La primavera en Posadas, la gran variedad de flora y fauna entre otras características peculiares de la región misionera no atendería  a la complejidad y entramado de la literatura territorial. 

Lo que determina los rasgos principales de la literatura territorial es la articulación posible entre la región cultural y la literatura argentina. Esta frontera intercultural atraviesa y coloca en permanente interacción el territorio cultural entendido como “la trama de relaciones simbólicas que interactúan en la cultura” (Santander,2012:2).

La literatura territorial participa de un criterio peculiarmente heterogéneo que atiende a una dimensión intercultural. Esta mixtura trasciende las fronteras de la narrativa de Alejandro Rodrigues al nacer y pertenecer a un territorio multicultural tripartito porque lo conoció sensorial y afectivamente y porque lo ha recorrido, caminado,vivido y sentido en las distintas etapas de su vida (Cfr.Andruskevicz,2015:82)

Alejandro Rodrigues por caprichos del azar nació en Foz do Iguazú (Brasil), vivió parte de su infancia en Ñacunday, Puerto Franco para emigrar, luego a la Argentina. En palabras del autor su literatura la autodefine como “de las fronteras”:


(…) “Nací en Brasil en el único hospital que había en la frontera, mi mamá primeriza en Paraguay porque en Argentina no estaban todavía los hospitales que Perón puso. Me crié en Paraguay hasta  que intentaron dos veces asesinar a mi papá y a mi familia entera” (Rodrigues, 2018)


La territorialidad intercultural no solo es percibida en el cuerpo y en la experiencia sino que se evidencia en la lengua, en el posicionamiento discursivo, en la historia y en las costumbres. 

El híbrido cultural se rastrea en la selección de vocablos en  lengua guaraní en la selección de algunos títulos de los cuentos. Por ejemplo AhaJeyta (voy a volver)historia  de un militante revolucionario del Movimiento 14 de Mayo que, en el momento de su rescate al otro lado de la frontera sin correr ningún riesgo de que los milicianos lo capturasen decide volver al campo de batalla.

Mita-i churi (niñito) es el relato heredado de la tradición oral: (…) “ Es la historia que me cuenta mi papá cuando se va a la guerra con quince años y todas las historias que me contó mi papá parece como antihéroe” (Ídem:2018)

Para cerrar este apartado señalaremos una constelación de categorías conceptuales que nos permitió alumbrar los alcances y fronteras de la literatura territorial. A estas alturas del análisis restaría explicar en qué consistiría la conformación de un proyecto literario-intelectual y autoral de un escritor/autor motivo por el cual expondremos la siguiente definición de la Dra. en Letras Carmen Santander:


(…) “Sería posible comprender el proyecto literario-intelectual de un escritor/autor desde la construcción de un léxico que describa y re-describa el lugar cultural y social en el que adquieren sentidos, las actuaciones y tramas discursivas, en las redes configuradoras de itinerarios, trayectorias y posicionamientos relacionales respecto a otros individuos y a otros lugares”






Y agrega:


(…) “Los proyectos autorales realizan el gesto político de integrar el discurso literario a la vida social porque en definitiva, desde su visión de autores/ escritores, los textos literarios no son reflejo de lo real o no son una realidad, sino un universo de signos culturales “(Santander,2015:40)



El posicionamiento discursivo de Alejandro Rodrigues es nítido y nos animaríamos a admitir que su proyecto literario e intelectual es combativo y en consecuencia militante en un sentido cabal. Así expresaba en la conversación personal: 


(…) “Mi literatura es definida como militante, no limitada a una concepción partidaria sino a una concepción política más amplia, entendida la política como toda acción o condición humana como decía Aristóteles: “somos animales políticos” somos seres políticos y desde ahí toda acción es política y toda omisión también es política y en ese contexto mi literatura como militante “ (Rodrigues,2018)



Fue evidente que Alejandro Rodrigues en su proceso de producción narrativa amalgamó su historia de lucha personal por la liberación del ente abstracto llamado “Patria” en un frente latinoamericano, recordó vivencias de militancia individual y colectiva y las transformó en ficción, configuró itinerario de las distintas cárceles en las que permaneció en la condición de preso político como la de Candelaria y de Coronda en donde se ubicaron los relatos “El lobo ya no está” y “Mientras extraño tu sabor y  tu aroma”

En la literatura territorial “el escritor asume su posición y pretende ser un actor social agente de transformación, por lo tanto, se instala en la autoría, es el enunciador que marca su posición de portavoz de un colectivo” (Santander, Andruskevicz, Guadalupe Melo,2015:14).

Desde un territorio cultural, social e histórico Rodrigues manifestaba: (…) “Me paro en un contexto complejo de injusticias, necesidades, de pobreza pongo mi granito de arena” (Rodrigues, 2018) y pretende ser un testigo en carne propia de transformación social con su  literatura como arma.

Paisajes ideológicos: El territorio temido.


El territorio literario no posee unas coordenadas espacio-geográficas visiblemente identificadas en un atlas cartográfico .La territorialidad se moviliza metafóricamente hacia ámbitos no localizables a la simple percepción sino que es arrastrada hacia la refracción de otra realidad espacial más temida.

El territorio se conecta con otros espacios geográficos que se transforman en dispositivos de poder. En Savia Sangre el Estado represor, dictatorial y opresor controla e instaura terror a un grupo particular de militantes revolucionarios defensores de la Patria.

Michel Foucault advierte que “el territorio es en primer lugar una noción jurídico política: lo que es controlado por un cierto tipo de poder ya sea sobre un suelo, ya sea en forma de discurso” (Foucault, 1977:116).

En el cuento “Te quiero, Elisa” se narra la situación social y política en el contexto de la militancia peronista a mediados de la década del setenta en la Argentina. En la narración se identifican indicios del peligro que conllevaba salir a realizar “pintadas”, “tirar panfletos” prácticas habituales de la juventud militante de aquella época.

En la siguiente cita de Foucault se lee el control de clase del aparato opresor: (…) “El territorio consiste en localizar el poder en el aparato del Estado instrumento privilegiado, capital, mayor casi único del poder sobre una clase sobre otra”(Ídem:119).

La narrativa ilustra el modo en que el Estado con su aparato represor instala el miedo y lo hace visible:


(…) “Días atrás los fachos nos asaltaron el local y destrozaron todo lo que podían. Vinieron enfierrados hasta los dientes, por suerte no chuparon a nadie, no hubo boletas, ni heridos. Eso sí, nos pegaron un jabón, eran las primeras advertencias salir de pintada, ya implicaba peligro. Se habían tomado recaudos, las medidas de seguridad elementales, se designó a los responsables, se repartieron los aerosoles” (Rodrigues, 2016:70)









Lo militar y lo administrativo se inscribe en el suelo:


“(…)  Supe entonces de cómo se salvó por un pelo de una boleta segura, había vuelto de una asamblea en la facultad a su pensión de estudiantes y tuvo una descompostura, me dijo, de las típicas femeninas, aclaró sobre el pucho y se fue a buscar una farmacia. Al volver, la manzana estaba rodeada de patrulleros y las compañeras de la pensión con manos en la nuca subían a un celular. Muchas de ellas, menos comprometidaspolíticamente, jamás volvieron”(Rodrigues,2016:70)



El poder a veces, construye lazos sólidos de solidaridad, concordia y saca fuerzas a pesar del temor: (…) “No sé si fue después de eso que comencé a quererla, creo que no, más bien diría que admirarla, a respetarla como compañera de militancia. Es que el peligro congrega, fraterniza, crea vínculos de afectos y los consolida cuando estos son genuinos (2016:70).

Las relaciones de poder ejercen control sobre el propio cuerpo. El Estado opresor, es dueño omnipotente de la vida y en este territorio tiene el derecho de otorgar la muerte: 


(…) “El día era diáfano, indiferente al repentino ulular de las sirenas, a la presencia de carros de asalto, a los gritos… todo el terror se me instaló de golpe en el alma, en los ojos, en la piel… voces, gritos, tumultos. Y Elisa… el cuerpo de Elisa yaciendo en la vereda y el radiante rojo de su sangre que adornaba su pecho. Y los ojos de Elisa, abiertos,grandes y mansos. Mirándome más allá de la vida” (Ídem: 73)



El territorio intercultural instaura determinados imaginarios sociales que es señalado como “el conjunto de significaciones que grupos, instituciones y un territorio cultural en su conjunto poses de sí mismo y así se instituyen; por consiguiente, las significaciones que tienen de los otros” (Santander, 2012:13)

En el cuento “El lobo ya no está” se aprecia el punto de vista narrativo de uno de los militares represores condenado en el presente del relato a veintitrés años. El “Lobo” justifica sus torturas demonizando y calificando a los presos políticos como “terroristas” y “subversivos”.

Se instala de este modo la alteridad ideológica con categorías como: delincuentes, terroristas, militantes del terrorismo armado, subversivos, vietnamitas, comunistas, falsos peronistas vs defensores de la Patria:


(…) “Estoy sentado con los demás acusados de, entre otras cosas, torturar a estos delincuentes terroristas hace más de treinta años, en la cárcel de Candelaria en donde ejercía como oficial penitenciario. A mi lado está el oficial José María Cuenca, otro acusado por docenas de estos subversivos.Pasan frente a los jueces federales, parsimoniosos y seguros acusándonos. Todas infamias y mentiras de estos tipos a quienes hemos derrotado militarmente,vencido y encerrado durante años en nuestras cárceles” (Rodrigues,2016:50)



La presunción de inocencia de este grupo de oficiales es singular a suautorepresentación: (…) “Nada podrán probar estos vengativos militantes del terrorismo armado que asolaron  nuestra Patria. Espero tranquilo mi absolución” (Ídem: 50).

El imaginario social de los oficiales que tienen sobre estos “otros” es la siguiente: “(…) Ahh y ustedes pendejos de mierda, se creen vietnamitas… los vietnamitas son otra cosa, ustedes mierdas comunistas disfrazados de peronistas… por algo Perón los echó de la plaza y prefirió a los muchachos sindicalistas y a Lopecito Rega “(Ídem:52)

El territorio ideológico de los militares es la convicción a rajatabla de su inocencia y la ferviente seguridad de que hicieron un bien a la Patria al extirpar el germen comunista y terrorista que destruyó a la nación:

(…) “Hoy después de semanas enteras sometidos a este juicio oral, los jueces dictarán sentencia. Los terroristas, salvo sus chácharas de víctimas, nada podrán probar para condenarnos. Espero mi absolución de culpas y cargos, de todas esas infamias urdidas por los terroristas. El juez a cargo de la lectura de la sentencia pronuncia mi nombre. Me paro firme y seguro de mi inocencia” (Ídem:54)



El imaginario social también se muestra en el cuento “Te quiero, Elisa”, en el cual los militantes revolucionarios se definen, marcan y se diferencian de otro grupo antagónico que promueve otros intereses ajenos al de la defensa de la Patria como la denuncia a las injusticias y  desigualdades sociales.

El protagonista señala, a través del aspecto físico y rasgos particulares la clase social de Elisa y afirma el colectivo al que pertenece:


(…) “Había pedido cigarrillos y yo se los tiré de lejos. Su aspecto frágil, su vestimenta, su descomunal sueco, el pañuelo atado a la cabeza resaltando los rasgos de su rostro denotaban su origen de clase…burguesita deduje y le tiré los puchos en agresivo gesto. Claro, nosotros veníamos de las bases del proletariado, de la vanguardia misma de la revolución, qué joder” (Ídem: 69)



La literatura territorial de Savia-Sangre reproduce las identidades y alteridades ideológicas y demarca la otredad por un lado de luchas, batallas y revolución en pos de ideales utópicos llevados a cabo en el espacio biográfico del autor y, por el otro resignificadas en un territorio lábil, dinámico, móvil y fronterizo entre realidad, historia, vida y ficción.


FUENTE DOCUMENTAL


  • ENTREVISTA A ALEJANDRO RODRIGUES (2018/08/28 por Nair Micaela Báez Borello).



BIBLIOGRAFIA ESPECÍFICA.


  • RODRIGUES, Alejandro (2016): Savia-Sangre: Tuguy-Yvirary. Editorial Universitaria. Universidad Nacional de Misiones, Posadas.



BIBLIOGRAFIA GENERAL


  • ANDRUSKEVICZ, Carla (2012 y continúa): “Territorios, paisajes y metáforas geográficas para pensar la literatura y repensar la literatura regional” en fragmentos de informes para la circulación interna Seminario territorios literarios e interculturales en UnaM- Fhycs-SiNVyP

------------------------------------ (2015): “Despliegues y lecturas sobre la biblioteca territorial” en  Territorios literarios e interculturales: investigaciones en torno a autores Misioneros y sus archivos. Ediciones Autores Territoriales, Posadas.


  • ARFUCH, Leonor (2002): El espacio biográfico: dilemas de la subjetividad contemporánea. Fondo de Cultura Económica, Bs As.


  • BAREND VAN, Heusden (2003) : “Semiosis y cultura: un modelo de banda ancha acerca de la evolución semiótica” en  Cultura y Semiosis tópicos del Seminario,10 pp.15-57,Universidad de Groningen, Holanda.


  • BENJAMIN, Walter (1991): El narrador. Para una crítica de la violencia y otros ensayos. Iluminaciones IV. Taurus, Madrid.


  • FOUCAULT, Michel (1977): “Preguntas a Michel Foucault sobre la geografía” en Microfísica del poder. Plantea Agostini, España.


  • PARRET, Herman (1994): “Contar” en  De la semiótica a la estética: enunciación, sensación, pasiones. Editorial Edicial, Bs As.


  • RICOEUR, Paul (1983):  Texto , Testimonio y Narración. Editorial Andrés Bello, Chile.


  • SANTANDER, Carmen (2012 y continúa): “Palabras de apertura a los paisajes territoriales” en  Fragmentos de informes para la circulación interna: Seminario territorios literarios e interculturales en fragmentos de informes para la circulación interna Seminario territorios literarios e interculturales en UnaM- Fhycs-SiNVyP


  • SANTANDER,C; ANDRUSKEVICZ,C;GUADALUPE MELO,C (2015):  “ Paisajes territoriales en  Territorios literarios e interculturales: investigaciones en torno a autores Misioneros y sus archivos. Ediciones Autores Territoriales, Posadas


--------------------------------------------------------------------------------------------------------: “Volver la mirada: Políticas y retóricas interculturales en Territorios literarios e interculturales: investigaciones en torno a autores Misioneros y sus archivos
. Ediciones Autores Territoriales, Posadas.





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