lunes, 4 de febrero de 2013

"Fronteras permeables" (Pierce y Lotman)



En esta tercera parte de mi ensayo me ocuparé de analizar la zona aledaña de mi diagrama conceptual y explicaré el porqué de mi elección para el mismo de un círculo con forma de elipsis.


Lotman, un gran investigador del significado en el mundo, ha llegado a la conclusión de que los sistemas semióticos no existen de forma aislada sino que funcionan de manera holística o unívoca. Tomados por separado no cobran acción y solo se activan estando sumergidos en un continuum semiótico, completamente ocupado por formaciones semióticas de diversos tipos hallándose en diversos niveles de organización[1]. Por tal motivo mi semiósfera es abierta con pequeñas rectas separadas y con flechas que giran como en un continuum infinito.


La justificación de la forma elíptica de mi diagrama se debe a la analogía que Lotman ha hecho con la biósfera cósmica llamando semiósfera a su objeto de estudio. En esta perspectiva el sentido espacial se emplea, para Lotman, en un aspecto exclusivamente metafórico.

Lotman considera al universo semiótico como un conjunto de distintos textos. Al referirnos a textos hacemos alusión a un conjunto de varios lenguajes a la vez ya sean orales, escritos u artísticos que interactúan entre sí auto- organizándose jerárquicamente.


El texto (que precede al lenguaje) está formado por un sistema de espacios semióticos heterogéneos donde circula algún mensaje inicial[2]. Pero para su formación se necesitan como mínimo dos lenguajes.


Uto se acercó a otra semiósfera, la cual, le resultaba extraña y eso le permitió añadir a su semiósfera un nuevo lenguaje desconocido para él: “Me dieron fruta y me dijeron que yo era “inteligente”. No sabía lo que quería decir: ahora sé, es lo que nosotros llamamos experto” (pág. 227). De esta manera el primer lenguaje que llamaremos A1 será inteligente, además, el que ha generado un nuevo sentido a su mundo discursivo; y el segundo lenguaje o A2 será experto provocando una traducción del primer lenguaje e incorporándola a la semiósfera que le era conocida. En el sistema general de la cultura los textos cumplen por lo menos dos funciones básicas: la transmisión adecuada de los significados y la generación de nuevos sentidos[3].


En Uto, el pigmeo, se ha cumplido ambas de las funciones que producen los textos (especialmente la de generar nuevos sentidos semióticos). En este aspecto “el texto deja de ser un eslabón pasivo de la transmisión de alguna información constante entre la entrada (el remitente) y la salida (el receptor): “A la noche me prometí ir todos los días a la choza de esos padres y madres para ver cosas portentosas y me dormí pensando en esa palabra “inteligente” (pág. 287). A Uto el texto “inteligente” lo ha dejado vacilante y le ha servido como un dispositivo pensante y latente porque ninguna cultura puede funcionar sin meta textos y sin textos en lenguajes artificiales.


En etapas de explosiones culturales, son incorporados textos que son los más lejanos e intraducibles, en estos momentos muchos sistemas chocan con otros y mutan su órbita, pero el espacio semiótico se halla colmado de fragmentos de variadas estructuras los que, sin embargo, conservan en sí la memoria del entero cayendo en espacios extraños[4]. Los sistemas semióticos dan prueba chocándose en la semiósfera y especialmente en las fronteras.


Estas fronteras semióticas  son la suma de los traductores “filtros” bilingües a través de los cuales un texto se traduce a otro lenguaje (o lenguajes) que se hallan fuera de la semiósfera dada[5]. Al poseer, la semiósfera, la característica de la heterogeneidad no puede permanecer cerrada, esto quiere decir, ser incapaz de estar en contacto con los textos alosemióticos o con los no-textos y para que éstos adquieran realidad para la frontera, le es indispensable traducirlos a uno de los lenguajes de su espacio interno o semiotizar los hechos no semióticos.[6]


Al llegar a Tanata, la comunidad de Uto, hombres y mujeres de otra tribu alosemiótica proveniente del país de las telas arañas invadieron su territorio y en consecuencia de esa intromisión el pigmeo se sintió atacado por esa otredad fronteriza y esto conllevó a Uto a querer penetrar esa semiósfera ajena e interrumpir esa dinámica transformándola a las leyes de su sistema semiótico: “Llegaron hombres y mujeres más altos que los tanatas, del país de las telas de araña…. No podemos actuar hasta no saber cuál es su espíritu, o si son capaces de aparecer o desaparecer a su gusto, o de meterse en nuestras chozas o en los sueños (…). Por fin me acerqué y me habló una mujer en nuestro idioma, pero suena tan raro en los labios de ella que cuando nombra las cosas parecen otras. Me parece tan raro que ellos, que tienen otro espíritu, se puedan apropiar del lenguaje… ¡Ellos pueden reducir las cosas grandes a pequeño y están pero no están ahí! La mujer me dijo que eso no era real, que no tuviera miedo. Si yo no entendí mal, ellos juegan a reducir las cosas grandes a chicas y viceversa, y también a aplanarlas y abultarlas a voluntad” (pág. 227).

La cultura en su totalidad puede ser considerada como un texto pero este, a su vez, se descompone en una jerarquía de textos en otros textos que forman entretejeduras atravesando las fronteras a través de las traducciones de los lenguajes extra semióticos.


El proceso de conocimiento mutuo  provoca la inserción en cierto mundo cultural no solo incentivando el acercamiento de las distintas culturas sino también el afianzamiento de la particular transmitiendo y generando nuevos sentidos semióticos. Por este motivo Uto  refuerza el conocimiento profundo de su propia tribu: “El obispo me llamó para ver si yo quería contar las costumbres de mi tribu a los antropólogos extranjeros y no quise, le dije que no me sentía capacitado. Pero no era verdad, lo único que podría decir en cuanto a mi tribu es que hacen lo que les parece mejor, lo que pueden y lo que creen con el poco mundo que conocen…. Cuando visité al obispo esta segunda vez, me pareció totalmente distinto a como lo percibí cuando lo conocí: ahora veía que era un hombre emprendedor, que hacía su trabajo como muchos otros hombres emprendedores en Kamala….. Cuanto más se desprecia (en Kamala), más se obtiene, y lo que se obtiene no sirve para nada justamente por ese mismo desprecio” (pág. 277)




Bibliografía.



*      Lotman, I  “Acerca de la semiósfera” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y del texto. Madrid, Cátedra, 1996.




*      Lotman, I: “El texto y el poliglotismo en la cultura” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y del texto. Madrid, Cátedra, 1996.




*      Lotman, I: “El texto en el texto” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y del texto. Madrid, Cátedra, 1996.




*      Lotman, I (1998): “La lógica de la explosión” en Cultura y explosión. Barcelona: Gedisa.




*      Marafioti, M (2004) “Charles S. Peirce. El éxtasis de los signos”. Buenos Aires, Biblos.




*      Peirce, Ch. S (1988): “Algunas consecuencias de cuatro incapacidades” en El hombre, un signo. Barcelona, Crítica.




[1] Lotman “Acerca de la semiósfera” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y el texto. Madrid, Cátedra 1996: 22

[2] Lotman “El texto y el poliglotismo de la cultura” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y el texto. Madrid, Cátedra 1996: 96

[3] (Ídem: 94)

[4] Lotman (1998) “La lógica de la explosión” en Cultura y explosión. Barcelona: Gedisa: 159.

[5] Lotman “Acerca de la semiósfera” en La semiósfera. Semiótica de la cultura y el texto. Madrid, Cátedra 1996: 24



[6] (Ídem: 24)



1 comentario:

  1. Espero no ser atrevido con mi comentario, dado que tenes una manera de fundamentar las cosas con bastante conocimiento de causa y soportado en múltiples fuentes, te tomas bastante tiempo para casa escrito...

    Aún así, se aferro a no quedarme con mi duda...

    Bien, si:

    "En el sistema general de la cultura los textos cumplen por lo menos dos funciones básicas: la transmisión adecuada de los significados y la generación de nuevos sentidos"

    al construir el diagrama conceptual y justificar la forma como "un círculo con forma de elipsis", se me enreda la palabra: "jerárquico", me confunde porque en si, lo "semiotico" implica una necesidad de lo uno con lo otro, en el caso de los textos, ambas funciones coexisten y significan de diversas maneras según el momento de su lectura...

    Lo jerárquico en mi significado implica un orden que "algo" es mas importante "que" implicando que pueda existir un sentido que no puede volverse en doble sentido o que una función es mas importante que la otra..

    Con el respeto que me mereces, y la admiración que tengo por ti, me gustaria un comentario al respecto.

    Un abrazo,

    Javier



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